¿Estara bien?

Hacia poco Cass me habia dicho que queria una casa en el bosque, y asi seria, en cuanto lo supe, pregunte por Forks que casas habia alli, pero no me dojeron mucho... el bosque era grande y para muchos, desconocido, asi que me decidi y fui yo misma a buscar una a la altura de los sueños de Cass, y mios tambien.

Estuve toda la tarde, y toda la noche buscando sin parar, corriendo de un lado para otro, no parecia haber nada... pero cuando ya lo daba por perdido, pude ver una edificio, fui hasta alli rapido y la vi.. era... perfecta, muy distinta a nuestra casa de Grecia, pero esta era muy especial, en un sitio muy hermoso y relajante, parecia ser una casa abandonada, asi que entre... no olia a nada, nada mas que a polvo, vegetacion, agua, humedad, madera y otros elementos similares, pero no a humano, al menos no recientemente.
Me pregunte como una casa asi podia estar en estas condiciones, ya que estaba casi destrozada, aunque con unos cuantos arreglos estaria perfecta.... habia habitaciones vacias y que se podian aprovechar. Me puse manos a la obra, tarde horas... hasta el amanecer, corriendo sin parar, menos mal que era vampira.

Cuando termine, corri a buscar a Cass, o mas bien, ella me encontraria a mi.

Puse una mano en su hombro y la mire con alegria, no habia fallado en mi decision, estaba satisfecha conmigo misma.

- Ajá, sabia que te gustaria Cass, es de tu estilo ¿a que si? en cuanto la vi.. tuve una especie de vision - dije riendo - ven, entremos.

La casa estaba ya mas o menos preparada, asi que no hacia falta mas cosas, por ahora, solo nuestras habitacion, yo ya sabia donde pondria la mia.

- ¿Que tal? - pregunte cuando llegamos dentro.

Recivi su abrazo efusivo... eso era el tipo de cosas que me alegraba la vida y me hacian quererla mas, mi querida Cass.

- Lo sabia.. sabia que te gustaria ¡ y es nuestra Cass! ¡nuestra! y la tendremos para siempre... siempre podremos venir aqui.... - si, mientras yo estviera viva, porque la mision que queria cumplir era.. casi imposible.

- Cuando quieras Cass....

Camine por la gran sala y me situe frente a la chimenea, con la que tantos quebraderos de cabeza habia tenido, la razon era que me encantaba el fuego, bien era sabido, pero a la vez, podia sermuy peligroso, porque si me enfada o me descontrolaba, podia hacer arder todo.

- Cualquiera mi Cass, la que mas te guste, yo ya tengo la mia.. esta ahi arriba.