¿Y que sucederá si yo ... ? [PRIVADO]

Caminar por las calles de Forks resultaba bastante sencillo cuando iba a un lado de Jasper, en realidad siempre me calmaba caminar a su lado aunque el tuviese su mente en otro sitio, por momentos notaba como su mirada viajaba de un lado a otro, pero en ningún momento se molestó en mirar hacia el frente o hacia mi, no pude evitar soltar un bufido por eso. Luego, sus manos sobre mi cintura me hicieron darme cuenta que aún estaba pendiente de mi, y mi sonrisa se ensanchó sólo en cuestiones de segundos, puesto que mi entusiasmo aún se encontraba vivo dentro de mi. Las calles parecían estar en mi contra, puestos que los caminos se hacían cada vez más largos, como si quisieran que no llegaramos a esa tienda a la cuál ya estaba comenzando a desesperarme por entrar. Dejé escapar un suspiro y alzé mi vista hacia Jasper, pero él seguía algo... ¿Preocupado? No, no era preocupación.. era algo más que era bastante difícil de deducir.. Mi comunicación con el había disminuido con el tiempo, por lo que ya no podía saber con claridad qué era lo que pasaba por su mente, pero quizás hoy sería un buen día para hablar.. ¿No?

Como fuese, volví a mirar hacia el frente con alegría, afortunadamente ya habíamos llegado y los minutos habían dejado de pasar. (Almenos para mi) No tardé siquiera dos segundos en dar los tres primeros pasos hacia adelante para entrar con rapidez, pero antes de que pudiera tocar la manilla de la puerta, Jasper se encontraba allí, abriendola enfrente de mi y haciendome un ademán con la mano para que pasara. Yo no esperé un segundo más, así que me avalanzé hacia la entrada a un paso elegante donde luego me llevé una sorpresa; Leonard ya se encontraba allí, enfrente de mi antes de que yo pisara el suelo de aquella tienda a la que ansiaba llegar. Me saludó con su típico saludo cordial: Un beso en la mejilla y un abrazo suave, yo nisiquiera dudé en devolverle el saludo y una sonrisa se ensanchó por mi rostro, justo la sonrisa que Leonard había catalogado como una "Angelical."

Hablar con él me llevó un buen rato, incluso no me había dado cuenta de que Jasper ya se encontraba dentro de la tienda esperando, o más bien... esperandome. Dejé escapar un corto suspiro y tomé la mano de mi acompañante sólo para que me siguiera, cuyo gesto él malinterpretó y se aferró a mi mano casi con necesidad, debía de admitir que me sentía algo incómoda.. y más cuando Jasper estaba observando. Atravezé el espacio que quedaba hacia mi esposo en cinco zancadas perfectamente coordinadas, soltando la mano de Leonard con una dificultad asombrosa, puesto que él se negaba a soltarmela, pero finalmente pude liberarme luego de que él extendió aquella mano hacia Jasper en señal de saludo, algo bastante extraño.

- Señor Hale, es un gusto finalmente.

La mano de Leonard seguía suspendida en el aire a la espera del saludo de mi marido, yo únicamente alzé la mirada hacia él donde obviamente pude leer algo más que la desaprovación ante su acto, y tambien algo de enojo.. ¿Habría malinterpretado tambien el gesto que hace unos segundos tuve con Leonard? Bueno, yo no podría explicarle ahora mismo el asunto, por lo cual desvié discimuladamente mi mirada hacia la derecha y escondí mis manos por detrás de mi espalda.

- Esto.. Jasper, él es Leonard, le pedí que viniera para presentartelo personalmente.

No me había dado cuenta de que mi voz estaba tan temblorosa hasta que a la final pude hablar. ¿Por qué sentía aquel miedo? Como si temiera a que fuera a perder algo.. Bueno, tenía que dejar de pensar en ello, puesto que yo no podía perderlo.. no podía perder a Jasper, o almenos eso creí.

Justo como había supuesto: Jasper había malinterpretado todos los sucesos, pero yo no lo culpaba.. quiero decir, ¿Quién no? Después de ver como Leonard se había aferrado a mi mano cualquiera podría malpensar, por un momento me sumí en mis pensamientos, disuadiendo mi atención de todo lo que estaba sucediendo allí con Leonard y mi... mi esposo. Me era difícil decir que lo era cuando los hechos daban a entender una supuesta traición por mi parte. ¿Me dejaría Jasper explicarle todo lo que estaba pasando? ¿Me dejaría siquiera.. decirle que Leonard no representaba nada más que un amigo para mi? ¿Aunque él claramente mostrara un interés por mi?.. Si toda nuestra historia iba a acabar, no quería que lo hiciera de esa forma.. ¡NO! No me iba a permitir pensar siquiera en una ruptura entre él y yo, no podía.. ¿Yo sin Jasper? No me podía imaginar mi eternidad sin él.. me dolía todo de sólo pensarlo, yo iba a dejar de ser "Alice Cullen" si él dejaba de ser mi "Jasper Hale" Todo, absolutamente todo dejaría de tener sentido.

Primero que nada alzé mi vista hacia ambos dos, me dediqué únicamente a ver a Jasper y escuchar sus palabras llenas de una tranquilidad fingida, justo en ese momento entrecerré mi mirada en el momento en que nuestras miradas se encontraron sólo por una milésima de segundo, un tiempo muy corto.. pero era fácil leer el dolor y celos de las facciones de mi Jasper, por su parte.. Leonard permanecía con una sonrisa curvada que daba a entender su despreocupación, algo que me hizo fruncir el ceño. ¿Se había percatado el tambien de la inseguridad de Jasper? Y si era así.. ¿Por qué no decía que todo era un malentendido? Lo único que hice fué abrir la boca con algo más de seguridad, tratando de hacer un lado el hecho de que Jasper no había estrechado su mano.

- Sí, sómos amigos únicamente. Perdona si no te dije nada, quería que fuese una sorpresa.

Sí, lo único que buscaba era una presentación animada entre ellos dos, e incluso esperaba que Jasper se llevara de maravilla con Leonard, quizás así nuestros vínculos afectivos mejoraban. ¿No? No me había dado cuenta de ese error.. de ese horrible error que había hecho que la situación se tensara con creces. ¿Por qué? ¿Por qué justo en esos momentos mis visiones comenzaban a fallar? De haber visto cómo se pondría Jasper con la sóla prescencia de mi mejor amigo hacía que me sintiera horriblemente mal. No pude seguir viendole la cara, así que opté por dar dólo unos dos pasos hacía atrás, como si intentara escapar de aquella mirada suya llena de malos-entendidos, pero no pude hacerlo.. por más que quisiera no podía dejar de ver a mi esposo, sintiendo la horrible necesidad de abalanzarme a sus brazos y aferrarme con mucha fuerza, con intenciones de no soltarme de él nunca jamás, pero la situación no me lo permitía.. Incluso Leonard se colocó detrás de mi, noté enseguida como colocaba su mano derecha encima de mi hombro correspondiente, alzé la mirada hacia él con preocupación y luego me asintió con el rostro, pero no dijo nada más.

Luego de aquél juego de miradas no pude soportarlo más, coloqué ambas manos sobre mi cabeza como si intentara que todos los sucesos se detuvieran, apreté mis ojos con fuerzas para hacer que alguna visión viniera a mi cabeza con rapidez, necesitaba con urgencia ver el futuro, si no veía las decisiones con Jasper iba a volverme loca, eso estaba enteramente escrito, fué entonces cuando mis deseos llegaron a mi mente con las primeras imágenes del futuro: Jasper y yo estabamos conversando.. Eso era una buena señal, almenos iba a dejar que me explicara, e inevitablemente dejé escapar una sonrisa, pero luego.. ¿Por qué? ¿Por qué lo veía dandome un beso en la mejilla y luego se iba escaleras arriba?

- Jasper.

Llamé su nombre con necesidad, como si sólo con eso en mi visión se daría media vuelta y se regresaba hacia mi, pero no lo hacía.. él seguía caminando en dirección hacia la puerta de la casa. ¿Y por qué yo no le seguía? ¿Qué pasaba? Mis piernas comenzaron a temblar literalmente, quería ir al futuro y correr hacia él para detenerlo. ¿A dónde se iba? ¿Iría de caza? No, eso no era posible, de ser sólo la caza yo lo hubiese acompañado, pero yo seguía de pie en la mitad del salón, junto con unos sonidos sollozantes a mi alrededor, ¿Quién? Quería mirar a los lados, pero no podía, la mirada en la visión seguía fija en el piso, haciendo que mi desesperación aumentara. ¡Malditas visiones defectuosas!

- Jasper. ¡Detente! ¡Quiero ir contigo! ¿¡Por qué tengo que quedarme!? ¿¡Por qué no voy hacia ti!? ¡NO!

Justo en ese momento mis rodillas se rindieron y mi visión se desvaneció, no me había dado cuenta de que mis rodillas estaban apolladas en el suelo y mi mirada fija en el mismo. Mis manos dejaron de estar en mi cabeza y fueron directamente hacia el suelo, apoyando mis manos en este para no caer boca abajo. ¿Qué significaba? Estaba atónita, nisiquiera podía moverme de allí, algo que fué totalmente alarmante.. Las miradas curiosas revolotearon hacia mi acompañadas de murmullos por lo bajo, algo que era demasiado incómodo, pero nada me importaba en ese momento.. ¿Por qué había visto eso? Por Dios Alice. ¡Reacciona! Mis visiones están defectuosas, no debería de creer en el futuro que yo predecía.. pero era tan doloroso que la realidad dejó de importarme, nisiquiera me percaté de la voz de Leonard a mi lado, suplicando a gritos que me levantara.

- Alice, ¿Me escuchas? ¿Qué has visto? ¿Es algo con él?

Aquella última frase me sonó a reproche, haciendo que me enojara demasiado, más sin embargo no dije nada más.. nisiquiera me moví del suelo, yo únicamente deseaba escuchar una voz.. La voz que me levantaba de cualquier situación.

Lo único de lo que podía estar segura era de que Leonard se había ido, siendo reemplazado por Jasper quien ahora se encontraba a mi lado, pero sin embargo yo no podía verle.. no podía despegar la vista del suelo, como si tuviera miedo de que con sólo ver su rostro aquella extraña y dolorosa visión apareciera nuevamente. Luego de unos segundos el comenzó a hablarme, eso era justo lo que necesitaba escuchar.. pero no era suficiente, yo estaba siendo presa por un miedo al vacío que era imposible de definir con palabras, era bastante cierto de que yo no podía vivir sin Jasper, y si él lo sabía. ¿Por qué había sucedido aquello? ¿Por qué de todas las posibles visiones que pudiera tener el futuro yo tuve esa? Parecía como si el destino quisiera destruirme antes de que sucediera lo inevitable, pero yo no podía dejar que eso pasara.. Yo quería estar con mi esposo, él me lo había prometido desde la primera vez que nos casamos que estaríamos juntos por esta interminable vida. ¿Sería el capaz de dejarme ahora?.. Bueno, si eso sucedía sólo tenía dos opciones: Sufrir eternamente... o Sufrir eternamente. Era tonto, pero yo ya no tenía más opciones.

Luego de aquello finalmente alzé mi vista hacia él, desprendiendome de todas aquellas ataduras que me hacían aferrarme a ese futuro. Él me había prometido que todo estaba bien.. que lo que había visto no era más que una pura mentira, pero todo era tan confuso que yo no tenía una clara idea de qué podría hacer.. únicamente confiar en él y en sus palabras. Sentí la necesidad de decirle algo.. decirle todo lo que había visto con detalles, pero temía que esa visión pudiese estar en lo cierto, ¿Qué pasaría si todo lo que vi era una posible decisión por parte suya? Yo no podría dejar que eso sucediera.. si íbamos a vivir lo que acababa de ver, definitivamente iba a hacer algo para impedirlo, aunque no estaba muy segura, jamás había estado en ese tipo de situación.. y mucho menos con Jasper, nunca jamás habíamos tenido discusiones de ningún tipo, únicamente nos limitabamos a estar uno al lado de otro y viceversa, yo ya estaba acostumbrada a esa clase de vida que siempre me hacía totalmente feliz, pero todo aquello parecía ser distinto ahora.. ¿Qué significaba la llegada de Leonard para mi esposo? ¿Una decisión errónea? Talvez.. aunque talvez yo pudiese aclarar cosas al respecto. Justo en ese momento me pidió que fueramos a casa, me di cuenta de que aún no podía hablar, así que me limité a asentir con el rostro y colocarme justo a su lado para finalmente salir de allí. En la salida nos esperaba Leonard, al quien despedí con mi mano derecha y seguí mi trayecto con Jasper, del cual tomé de su brazo y lo abrazé con suavidad hacia mi. Luego, escuché su voz nuevamente, a la cual no pude dejar de contestar esta vez.

- El destino lo haces tú mismo, Jasper. Y yo me encargo de ver esas decisiones antes de que sean planteadas, por eso dime... ¿Qué es lo que habías decidido hacer?

Sin poder evitarlo, una oleada de miedo invadió mi cuerpo y me hizo dar un leve respingo, pero sin embargo mi mirada siguió clavada en aquella expresión suya llena de más tranquilidad que antes, no me había dado cuenta de que mis temores se habían ido por completo, parecía como si la sóla prescencia de Jasper calmara todas mis preocupaciones, aunque yo sabía que aquello no era obra de su don.. era una sensación que me había calmado de forma especial.. algo más fuerte que su don: Su prescencia. Y entonces.. con el paso de los minutos, su boca manifestó las palabras que yo tanto había deseado escuchar, y luego de ello me abrazó, aquellos brazos tan cálidos para mi me abrazaban de una manera única y especial.. Era el perfecto "consuelo" que necesitaba en esos momentos llenos de tensión, así que únicamente dejé escapar un suspiro y me aferré a sus brazos y cuerpo con necesidad, amoldandome perfectamente a su cuerpo en aquél abrazo que tanto había anhelado en recibir hoy por su parte, luego, escondí mi fino rostro entre sus ropas, ahora realmente me sentía cómoda.. y sin darme cuenta, las palabras salieron por sí solas.

- Yo tambien te amo, te amo demasiado, aunque eso ya lo sabes. ¿No? Siempre serás mi Jasper.

Hice énfasis en las ultimas palabras que dije, si bien era cierto de que yo le amaba demasiado, tambien era cierto de que él era único para mi, siempre lo fué y lo será, no pude evitar deja escapar una sonrisa, la primera sonrisa que había manifestado luego de todo aquello que había visto, Jasper había conseguido animarme sólo con un juego de palabras y aquellos gestos suyos que yo tanto amaba, por ello me coloqué de puntillas hacia él y le deposité un suave beso en su mejilla, para luego darle otro en sus labios con ternura. Finalmente me deshice del abrazo y me coloqué a su lado nuevamente, asegurandome de tomar su mano con firmeza y entrelanzandola con la mia para seguir en camino hacia la mansión, a la cual llegaríamos sólo en cuestiones de minutos. Sin embargo, la preocupación invadió de nuevo mi ser.. puesto que era en la mansión donde esa visión había sido vista..

El trayecto a la mansión fué silencioso, haciendo que el viaje de regreso fuese aún más largo. Ninguno de los dos habíamos emitido palabra alguna, puesto que no habían muchas palabras que decir en un momento tan.. ¿Tenso? Debía de admitir que extrañaba al Jasper animado y alegre, eran muy pocas las veces en que se encontraba así.. y en esas veces yo era capaz de ayudarle o siquiera hacerle sacar una sonrisa, pero parecía como si esta vez el hubiese puesto un tipo de barrera ante mi que no me permitía ayudarlo, las experiencias nunca antes vividas eran insoportables cuando se trataba de algo malo, pero esto no era malo.. era pésimo. No estaba acostumbrada a no ser la mano de apoyo de mi esposo, así como tampoco estaba acostumbrada a guardar la calma luego de haber tenido una visión así, pero supuse que preocuparía más a Jasper si seguía emitiendo mis temores, así que dejé que mi espaciosa mente viajara por otros lares, pensando en Edward y el resto de la familia. ¿Estarían todos bien? Ahora era extraño vernos a todos reunidos en la mansión, incluso Carlisle y Esme no habían vuelto a aparecerse por el pequeño pueblo de Forks, de seguro estarían en otra luna de miel.

Mi mente dejó de revolotear cuando estuvimos enfrente del porche, del cual subimos las escaleras a un paso más lento del acostumbrado, eso sólo me hizo deducir que estar sólos en la mansión no iba a ser para nada bueno, pero Jasper me había prometido que no había decidido nada, por lo que esa visión dejó de tener relevancia para mi.. o eso creí. Finalmente nos paramos enfrente de la blanquecina puerta, dirigí una tímida mirada hacia él en señal de duda, pero lo único que pude ver era el mismo semblante que tenía hace unos minutos atrás, aquello me hizo suspirar pesadamente.. justos en esos momentos deseaba tener el don de Edward. ¿Qué estaría pensando? Me inquietaba bastante.. puesto que él no soltaba siquiera una sonrisita leve, nada, sólo estaba serio y pensativo, sentí la gran necesidad de decirle algo para aumentar sus ánimos, pero en cuanto abrí la boca la cerré enseguida.. él ya había entrado a la casa y yo no tardé mucho en seguirle el paso, donde luego yo cerré la puerta a mis espaldas.

- Te prometeré lo que quieras a cambio de algo.

Musité en tono de voz bajo a sabiendas de que él podría escucharme aunque estuviese parada a kilómetros lejos de él. Verlo caminar por todo el salón principal me dejó algo sumisa en mis pensamientos por unos momentos: ¿En qué estás pensando, Jasper? Era lo único que me preguntaba a mi misma, sin embargo jamás obtenía una respuesta.. lo único que me quedaba era esperar a que él me aclarara sus ideas y esperar a que todo estuviese perfectamente, aunque yo sabía de antemano que no era así.. era esa la razón por la cual tambien quería hacerle prometer algo, si todo era como yo lo estaba pensando.. entonces no había mucho que hacer, solo resignarme al vacío eterno que sentiría mi corazón luego de su... luego de su partida. Pensar en ello me dió una punzada en mi invisible corazón que pudo hacerme entristecer en cuestiones de segundos, pero no era el caso ahora, así que alzé la mirada a mi esposo de manera decidida y proseguí luego de aclarar mi garganta.

- Pero tú has preguntado primero, así que dime.. ¿Qué quieres que te prometa? Será como tú has dicho, lo cumpliré pase lo que pase.

No estaba muy segura de mis palabras, pero no me quedaba nada más que enfrentarme a lo desconocido, yo confiaba en Jasper.. así que no podía ser algo malo, durante toda nuestra vida juntos nos habíamos prometido cosas el uno al otro, pero entonces.. ¿Por qué esta vez desconfiaba tanto? Mis temores me habían invadido por segunda vez en toda mi vida inmortal, la primera había sido desde la decisión de los Vulturis, quienes habían amenazado de muerte a toda mi familia haciendome tomar decisiones que me hicieron quedar como una "cobarde" en todo el sentido de la palabra, pero esta situación no se semajaba ni por asomo, esta vez tenía la sensación de que iba a perder una gran parte de mi vida.. en pocas palabras, sentía como si estuviera al borde de un precipicio, del cual nunca iba a morir si saltaba.. pero ya jamás iba a poder regresar a la superficie. Fué difícil volver a la realidad, pero me dediqué a observar sus ojos fijamente sin ninguna expresión, deseando internamente que aquél momento no acabara nunca jamás y él me mirara de la misma forma que yo a él, puesto que este era mi sueño.. en este momento yo era Alice en el país de las maravillas. Y no quería volver al mundo real para ser infeliz..

Por primera vez en todo el día había sentido ese bienestar corriendo por mi pequeño cuerpo en cuanto Jasper se había acercado a mi, en realidad sólo sentí la pequeña felicidad que me quedaba cuando se acercó tanto a mi que me hubiese dejado sin respiración si en verdad la necesitara. Sus suaves caricias despertaron en mi aquél amor que había creído marchito por su parte, y como era de esperarse.. esperé con antención sus palabras sin siquiera apartar mi vista de él, como si todo mi campo visual estuviese ocupado para Jasper únicamente, y tampoco es que quería que se desvaneciera, puesto que todo en esas fracciones de segundos era perfecto.. era todo lo que había anhelado y necesitado desde un principio. ¿Realmente hacía falta decirselo? él más que nadie me conocía perfectamente, sabía lo que necesitaba todos los días: A él. Hoy parecía que no iba a tenerlo.. porque junto con sus caricias sentía algo más que cariño, sentía algo de tristeza, exactamente la misma que había sentido en tiempos anteriores desde la tienda.. esa situación me había hecho tomar la decisión que tenía en mente al no poder hacer nada más.

Justo en ese momento se apartó de mi lado con bastante velocidad, algo que me hizo dudar por unos momentos.. Estaba a punto de preguntarle, pero aquél efluvio conocido y querido por mi había llegado a la mansión con aquella elegancia que le identificaba, sabía que se trataba de Leonard.. pero aún así mi mirada quedó clavada en Jasper cuando él entró con exasperación por la gran puerta blanca, deduje enseguida que se había estado preocupando por mi más de lo que yo pudiese haber imaginado, así que dirigí mi vista hacia él y le dediqué una gran sonrisa en señal de disculpa, nunca jamás me había gustado preocupar a mis seres queridos, y mucho menos si se trataba de mi. Primero que nada clavé mi vista en Leonard y caminé hacia él dando vueltitas, pero me detuve enseguida en cuanto se posó enfrente de mi en menos de dos segundos. Sus gestos no los pasé por alto, había notado claramente como fué por mi de un tiro, sin siquiera dar una mueca de saludo a Jasper o algo así. ¿Por qué ese comportamiento? No lo sabía, pero no era momento de abordar el tema.

- No te preocupes más por mi Leonard, estoy perfectamente. - Mentí descaradamente, pero lo haría constantemente si implicaba que no se preocupara más. Luego de eso, noté con claridad como evitaba a Jasper, un gesto que no me hizo para nada de gracia.. pero lo dejé pasar. - Y con respecto a la caza.. déjame pensarlo. ¿Vale? Hace poco regresamos de una, no creo que nos haga tanta falta..

Justo en ese momento enmudecí, odiaba cuando él colocaba esas expresiones llenas de desánimo que me hacían sentir sumamente culpable aunque no hubiese hecho nada en teoría, por lo que dí unas cuantas palmaditas en su hombro derecho sólo para que recobrara su atención en mi, luego lanzé una fugada mirada a Jasper, no estaba para nada feliz.. y eso me hizo llegar a una conclusión bastante apresurada, pero nadie decía que no podía ser correcta.. ¿Sentiría Jasper celos por mi amigo? Y si era así. ¿Por qué no me dejaba en claro su descontento? La comunicación era lo último que faltaba entre nosotros dos, y era bastante alarmante.. sin embargo, yo iba a permanecer sin decir nada. Luego de unos segundos, observé de nuevo a Leonard mientras dejaba escapar un largo suspiro.

- Está bien Leonard, te acompañaremos. Será la semana entrante.. ¿Vale?

- Eres un amor, ¡Muchas gracias Alice! Te esperaré la semana entrante en Goat Rocks, llevaré a Blake conmigo.

- Allí estaremos, y hablando de Blake.. se aparecerá armando un lío en unos minutos si no vas a casa.

- No puedo permitir eso. - Rió entre dientes. - Nos vemos entonces, Alice, Sr Jasper..

Y entonces, se dió la vuelta y se marchó con tranquilidad por la puerta blanca, donde luego su efluvio desapareció en cuestiones de segundos. Durante todo el monólogo había notado como hablaba únicamente para mi, pese a haber hecho énfasis todo el tiempo en las plurales, parecía como si a él no le importara si Jasper iba o no a sabiendas de que era mi esposo. ¿Era ese el comportamiento que Jasper tanto odiaba? Quizás había llegado a conclusiones durante todo este tiempo y yo no me había dado cuenta, un error demasiado grande e imperdonable de mi parte. Ahora me dolía más que nunca el verlo parado allí en la pared, sin decir palabra alguna peses a que mi gran amigo se había marchado por el día de hoy, minuto tras minuto sentía la necesidad de hacerle sonreir.. pero no podía mirarle siquiera, incluso no me había dado cuenta de que mi mirada estaba fija en el suelo hasta que la alzé de nuevo hasta la puerta blanca, donde el silencio aún predominaba.

Finalmente dejé escapar un suspiro y di un pequeño paso hacia donde él se encontraba, seguido por otro hasta comenzar a avanzar hacia él a una velocidad humana y tranquila. Poco a poco pude alzar mi vista hacia él y verle con claridad, su mirada aún seguía perdida y parecía rehusarse a mirarme.. y no lo culpaba, no le había explicado nada y no sabía si podría hacerlo ahora, lo único que quería en esos momentos era que se diera cuenta de mis verdaderos sentimientos, y que no le quedara duda alguna de que yo le amaba demasiado.. pero ya no podía confiar en eso, puesto que había intentado transmitirselo durante todo el día, pero él por primera vez no parecía darse cuenta.. un gesto bastante doloroso, pero que no pensaba demostrar. No tardé mucho en colocarme enfrente suyo, donde alzé mi mano derecha y la coloqué en su barbilla sólo para que me viera nuevamente, en sus ojos podía detectar ese dolor insoportable que me carcomía a mi tambien.

- Jasper, tú más que nadie sabes que no soporto esto. - Musité con una voz quebrada y poco firme. - Así que podrías decirme.. ¿Qué es lo que te sucede? Me estás preocupando demasiado y odio no poder serte útil.

Declaré finalmente, o almenos eso creí. Mi voz había sonado tan quebrada que sería difícil saber si era yo la que hablaba, pero por lo menos pude hacerle devolver una pisca de atención hacia mi, puesto que noté como sus cejas se enarcaban con cuidado y perfección. En ese momento supe que hablaría, haciendome devolver hacia el tema que habíamos dejado hace unos cuantos minutos atrás.

Derepente todo pareció volver a tener sentido desde la partida de Leonard, recobrando la conversación que habíamos dejado a medias a causa de este. Mi mano se retiró de su rostro justo en el momento en el que él había recobrado su atención hacia mi, sin embargo me pareció notar que aún no podía verme a la cara.. ¿Por qué? Sus gestos y forma de actuar no dejaban de preocuparme, en mi interior aún deseaba que regresara mi Jasper. Aquél por el cual deliraba ante su sólo contacto y aquél que siempre juraba protegerme ante cualquier situación.. mi mente viajó por todos los rincones sólo para buscar una respuesta del porqué de su comportamiento, pero todos recaían en Leonard.. ¿Era él enserio el motivo? ¿La razón del cambio de mi amado? No podía ser, tenía que haber algo más.. Justos en esos momentos deseaba saber que sucedería con la palabra "Nosotros".. pero tenía miedo de lo que pudiese ver en el futuro, la última visión que había tenido no me había causado ni una pisca de gracia, y no quería arriesgarme a ver algo similar a aquello que me había causado un daño prematuro y enorme.

... Fué entonces cuando lo entendí todo.

Jasper me rodeó con un brazo con firmeza, mientras que sus palabras seguían corriendo de un lado hacia otro en mi mente, no pude evitar abrazarle con suavidad y cuidado en un intento de demostrarle cuanto le necesitab, sin embargo ya todo estaba claro y predicho en mi mente. Alzé mi vista hacia él timidamente, observandole con un gesto perdido y marcado por bastante dolor: Ya lo sabía, ya lo entendía todo. Sin poder evitarlo, pasé mi pequeña mano sobre su mejilla derecha, dejandole una serie de caricias mientras observaba su rostro firme, el cual hace unos segundos atrás me había dedicado una sonrisa, mi sonrisa. Dejé escapar un pesado suspiro, me era imposible mencionar palabra alguna cuando ya había encontrado la mejor respuesta para todo aquello, esa era la respuesta que había tenido todo el tiempo frente a mis narices. ¿Cómo no pude darme cuenta antes? Mi visión me lo había dicho todo.. me había dicho la impresionante decisión de Jasper que me negaba a aceptar rotundamente, pero luego de escuchar sus últimas palabras.. todo me había quedado dolorosamente claro. El me pedía que me cuidara, y era justo lo que iba a hacer a cambio de algo.

- Al parecer mi don sigue funcionando perfectamente, ahora entiendo lo que quería decir mi visión respecto a todo esto.

En ese momento mi voz sonó bastante firme, pero era fácil para cualquiera darse cuenta del dolor que estaba oculto detrás de ellas. No podía evitar dejar de sentir miedo, no estaba para nada acostumbrada a pasar un sólo día sin mi perfecto soldado, quien ahora parecía tener en claro su decisión para irse, no le iba a pedir que me explicara, ya que él no era un objeto para mi y era su derecho decidir hacia qué rumbo seguir, aunque este implicara el seguir sin mi. Una nueva punzada de dolor atravesó mi inexistente corazón, dándome a entender mi nuevo futuro si Jasper se marchaba: Una eternidad llena de vacío y dolor, ¿Realmente deseaba yo vivir eso? No me importaba para nada morir por segunda vez si implicaba el vivir sin Jasper, y él lo sabía, ¿Era por eso que me había pedido prometerle que me cuidara? Era demasiado difícil, yo no estaba lista para afrontar todo aquello, no me podía hacer siquiera una imagen de como yo podría seguir de esa forma, puesto que estaba segura de que en cuanto el se marchara... yo volvería a ser Alice, la pequeña vampira nómada.. Ya que no deseaba seguir perteneciendo a la familia de Carlisle si el miembro más importante para mi no estaba: Mi vida.

- Está bien Jasper... te lo prometo, ahora me toca a mi.

Justo en ese momento me despegué de su cuerpo sin muchos ánimos, era increíble ver como era capaz de caminar luego de darme cuenta de una realidad que debería haberme matado ahora mismo, deduje que la sóla prescencia de Jasper en ese momento era lo único que podía mantenerme de pie, a pesar de que sabía que eso no duraría mucho.. y el dolor se apodedaría de mi en solo cuestiones de segundos. Di los primeros pasos hacia atrás hasta darme media vuelta y salir corriendo hacia.. hacia nuestra habitación. Por unos momentos sentí la necesidad de retractarme y regresarme hacia donde él estaba, sólo por miedo de pensar que desaparecería si yo me tardaba por mucho tiempo, fué por ello que revoloteé por la habitación hasta detenerme enfrente de un pequeño escaparate situado justo a un lado del gran armario, abriendo el primer gabinete con cuidado para no romperlo. En realidad no habían muchas cosas allí, solo una serie de libros y unas que otras joyas, me aseguré de rebuscar por todo el pequeño espacio hasta encontrar finalmente lo que estaba buscando. Luego de aquello, salí de la habitación y me dirigí nuevamente hacia Jasper.

Bajé las escaleras a una velocidad humana y tranquila, puesto que el espacio que nos separaba no era demasiado, y así podría apreciar su fisionomia con más cuidado, luego; dejé escapar un suspiro cuando finalmente lo tuve enfrente de mi, se me hacía bastante duro verle a la cara cuando sabía que él estaba apunto de irse de allí, y abandonarme en una oscuridad absoluta de la cual posiblemente no saldría nunca jamás.

- Prometeme que no te quitarás esto nunca, lo bordé yo hace unos días, así que podría decirse que es un recuerdo de mi parte.. te ayudará para que no olvides nunca. Y si es posible que algún día... regreses... - Mi voz sonó bastante quebrada con aquella última palabra. - Regrésamela.

Fué entonces cuando tomé cada extremo de la cinta negra que tenía en mis manos para extenderla, era una tela bastante fina y elegante. Lo que menos quería era utilizarla para decir "Adios".. Puesto que no deseaba nada más que estar con él todo el tiempo, deseaba irme con él tambien, pero desear era algo que posiblemente ya no podría hacer nunca jamás.