¿Bienvenida a Forks? [libre]

Mi grupo esta perdido, pero no habia porque preosuparse... les encontraria rapidamente. No eran muchos, pero esperaba encontrar mas a quienes "adiestrar".

En realidad, la razon por la que estaba en Forks era simple: me habian dicho que aqui habia vampiros como nosotros, de ojos dorados y que bebian sangre animal, y no humana, una gran alegria para mi, como un triunfo.
Y por eso estaba alli... por eso.. no, habia mas, el odio hacia un grupo que milenio tras milenio habia conseguido mas y mas poder, y porque les daba la gana, no habia derecho.

Bufe enfadada de solo recordarlo. Decidi relajarme viendo como el sol hacia preciosos destecho contra mi piel, era un espectaculo.

Gire la cabeza al oir su voz especial, era mi Cassandra, Cass como me gustaba a mi llamarla, ella era como mi hija, o mi hermana pequeña, tan maravillosa ella... ¿quien seria capaz de hacerme caso y renunciar al placer de la sangre humana, por una de baja calidad como era la de animal?
Por eso la queria tanto, por ser asi.

- Ah, Cass, crei haberte perdido para siempre.. - bromeé, mi voz era mas potente y grave, pero melodiosa - ¿curioseando por ahi?

Sonrei al verla llegar, la tome por los hombros y la mire a los ojos, bajando un poco el cuerpo para mirar sus ojos, ya que yo era bastante alta.

- Mi querida Cass, bien sabes por lo que he pasado... sabes que busco y aqui esta todo - dije el todo de una manera especial - ¿sabes? aqui se encuentran vampiros como nosotras, con nuestros ojos... y vampiros que no lamen el sitio por donde ha pasado un Vulturi - dije con dureza y decision.

Me endereze y mire el bosque.

- Este sitio se encuentra en peligro si yo estoy aqui.

-¿Te gustaria tener una casa? - asenti con la cabeza varias veces - si, seria una buena idea, tener una casa aqui, una normal, no muy grande ni lujosa, porque creo que no estaremos mucho tiempo aqui, o eso espero con todas mis fuerzas.

Meti una mano en el bolsillo de mi pantalon y saque un mechero, era muy bonito, de piel de cuero roja, era especial para mi, me recordaba muchas cosas... Lo abri y lo encendi, sonrei al ver la llama.

- Espero que pronto Cass... tengo ganas de pasar a la accion.

Gire mi mirada hacia ella al mismo tiempo que mi sonrisa se expandia en mi rostro.

- Asi es pequeña, se lo que piensas... - sople y el fuego bailo, era hipnotico, lo cerre y mi expresion se vilvio mas dulce - tranquila.. vendran, y si no lo hacen, lo comprendere, con tal de que estes tu - le guiñe un ojo y con un movimiento rapido de manos, el fuego aparecio entre ellas, alumbrandonos.

- Cuantas ganas...

Apague el fuego al ver su miedo, a muchos de nosotros nos daba miedo este elemento, porque el podia ser letal para nosotros, podia destruirnos,... siempre pense que era un buen don el de poder manejar el fuego, era util.

-¿Buscamos casa? - pregunte, sonriente.

La observe con una sonrisa apacible y el ceño fruncido, viendo sus pasos.

- ¿Donde quiero tenerla? No, esa no es mi decision, te la dejo a ti ¿donde querrias tu? te concedere ese deseo.. ¿en el pueblo? ¿en las montañas? ¿en el bosque? Tu eliges.
La queria mucho, era una excelente compañia, y me alegraba la via con su voz aguda, su risa vivaz y sus saltitos de bailarina.

La mire y luego observe mi alrededor, era un lugar bastante bonito, triste, pero bonito, muy distinto al lugar de donde veniamos.

- Echo, en el bosque.... me parecio ver antes una casa bastante grande, parecia abandonada, podriamos ir alli...¿verdad? Seguro que te gusta - guiñe un ojo.