En la Entrada con Renesmee enferma (Libre)

por **Jacob W. Black** Jue Ago 27, 2009 10:21 pm

Frené la moto justo en la puerta de la mansión. Seguía como siempre, como si no pasase el tiempo en esta casa.
Me bajé cuando coloqué la pata extra de la moto en el suelo y levanté a Ness de la moto con cuidado y la coloqué sobre mis brazos intentando no darle ningún movimiento brusco para que le doliese más.

-Ya estamos aquí-caminé lentamente hacia la puerta con el semblante serio. No quería que nos reencontraramos así, tal vez hubiera sido mejor no ir a buscarla, porque ahora estaría bien si no nos hubiesemos visto. La puerta estaba cerrada y me acerqué a la ventana sin ver a nadie.-¿Tienes las llaves?. No sabía si llamar al timbre o no. ¿Por qué ? ¿Para no molestarlos? Pues vaya...Fuí y llamé al timbre y aporreé la puerta con fuerza para que saliesen a buscarnos.

Lo que menos quería era entrar aquí con ellos, con Bella. Pero estaba con Renesmee y ahora ella dependia de mí.

por **Edward Cullen** Vie Ago 28, 2009 1:34 am

Adentrarme en la mansión... era revivir aquellos nostálgicos momentos. Caminé hasta a sala de música, y allí deslicé los dedos por mi viejo piano. El que tenía en casa era nuevo como mi hogar y mi familia, no tenía los mismos recuerdos que ese viejo piano de cola que Carlisle me había regalado para que me entretuviera en las noches cuando no me soportaba ni a mi mismo... Me senté en el taburé y comencé a tocar, estaba tan acostumbrado que ni siquiera pensaba en la melodía y a veces me dedicaba simplemente a improvisar.

¿Dónde estaban todos? sabía lo dolorosa que era mencionar esa cuestión internamente. Puesto que mis pensamientos se perdían en el lugar más recógnito de mi mente. El dolor seguía latente... recordaba a mis padres a efectos prácticos. Esme por brindarnos aquella generosa maternidad... Y Carlisle, nuestra figura paterna y creador de algunos miembros de la familia, donde yo me incluía. Pensaba que tal vez, encontraría aquel torbellino inalcansable de adrenalina, Alice... o incluso a... Bella con Renesmee. Mi niña... deseaba verla, hacía semanas que no la había visitado... de no ser por Renesmee fuese terminado como los Vulturis. Me quedaría como una estatua, quieto e implacable al paso del tiempo hasta convertirme en una estaua sin vida de ojos velados y piel que parecía hecha de polvo.

Renesmee me salvaba pero me torturaba con sus ojos marrones... esos orbes que eran iguales a los de Bella. En parte me torturaban, pero por otra parte, me ayudaban a seguir cada semana ante aquel abismo, en que ya estaba hundido. Mis manos se deslizaron absortas por las teclas del piano. Aquella olor... ahora más intensa y desagrabale que antes por el tiempo transcurrido, seguía siendo inconfundible. Jacob Black. Pensé casi con desgarro... pero a la vez, quedaba opacada por el dulce aroma de... Renesmee. Mi rostro seguía igual de tenso... y ya no por el hecho de que estuviesen juntos, sino por la preocupación en que los pensamientos de Jacob se colaban en mi mente. Podía revivir cada imagen... y sentí cómo un ligero gruñido subía por mi traquea. En un movimiento inhumano me dirigí hacia la entrada y abrí la puerta con tanta fuerza que creí haberla partido por la mitad.

-¿¡Acaso te parece correcto presentarte enfrente de ella, después de todas aquellas semanas sin que ella supiese nada de ti!? - rugí exasperado y sujeté a Renesmee entre mis brazos con sumo cuidado. Miré a Jake con toda la furia contenida hasta el momento, pues la insensatez que acababa de cometer había puesto en peligro la salud de mi hija... le dí la espalda, tragándome las ganas de cometer una locura. A sabiendas de que a pesar de todo, Jacob, tendría el descaro de entrar a la mansión sin pensárselo siquiera. Pero ahora, sólo me importaba mi hija. En pocos segundos me encontraba recostando a Renesmee en el sofá con suavidad...

por **Renesmee C. Cullen** Vie Ago 28, 2009 1:56 am

La suaves manos de Jacob me sujetaban , intentaba tener la mente en blanco, simplemente para no escuchar ruidos que hizieran que mi amreo y dolro de cabeza se incrementaran, sujete su camisa cuando me vino una oleada un poco mas fuerte del dolo de cabeza, puse una pequeña mueca, nunca antes me había dolido tanto, sería causa del shock, del extres y también, de la pequeña depresión que había tenido durante todos estos días que Jake y yo habíamos estado peleados.Escuche la suave voz de Jacob en mi oido, y note como con suavidad me bajo de la modo, sin soltarme, emepzandoa andar, notaba cada paso que daba, y su respiración.incluso por momentos podía notar el latido de su corazón.

¿Las llaves? No había tenido tiempo para eso, pero lo mas probable era que estubieran dentro de mi mochila, mamá hacía tiempo que me había dado unas, por si en algún momento yo llegaba a la casa y ella no estaba, algo que pormomentos pasaba, aunque solo cuando se iva de caza por unas cuantas horas.

estube a punto de responderle, pero un brutal ruido y una voz muy conocida para mi hizieron que me quedara sin palabras ¿ Papá? ¿Papá estaba en casa? No me lo podía creer, mi corazón se lleno de una extraña y rebosante felicidad, lo había extrañado tanto, hacía mucho que no venía a verme, y la ausencia la note como nadie se lo imaginaría nunca...Deje de sentir el calor del pehco de Jake, para sentir el frío de mi padre, tan familiar como siempre, no dije nada, no quería hablar en esos momentos, a cada gesto que hacía, mi dolor aumentaba, solo quería que cesada, que cesara ya...En menos de un minuto senti el sofa debajo de mi y mi padre depositandome en el suavemnete.

-Papá... - muse suavemente, sin hacer ningun movimiento ,palabra o gesto brusco - hacía días que no te miraba, te extrañe...

Susurre con voz suave, aunque sabía que el me escucharía, manteniendo mis ojos cerrados, sintiendo también al presencia de Jake en la sala, tranquilizandome al saber que estaba allí también.

por **Jacob W. Black** Vie Ago 28, 2009 2:10 am

-¿Acaso te parece correcto a tí presentarte aquí cuando has dejado de lado a toda tu familia?-tenía demasiada ira contra ese hombre. Dejó de lado a su hija y Bella...
Quería que se enterase y sabía que estaba leyendo mi mente.

Mira chupasangres, te lo diré desde ya. Pienso vivir siempre con ella y casarme si hace falta. Formaré la mejor familia y ni tu ni nadie se meterá en medio.

Entré en el salón y me recosté en suelo para tomar la mano de Renesmee y besar su frente.-Trae agua o algo para bajarle la fiebre.

por **Edward Cullen** Vie Ago 28, 2009 3:39 am

Siempre me había negado a creer que tenía alma por ser un vampiro. Creía que la había perdido en el momento de morir como humano y nacer como aquello que consideraba un monstruo. El ser nocturno chupa sangres... pero aún así, allí estaba yo. Desmoronándome al ver en ese estado a mi hija...

- Shhh... - susurré en un intento de sonreir. Acaricié sus tersas mejillas con suavidad, depositando un suave y cálido beso en su frente, estaba ardiendo... separé mi rostro de ella tan sólo para observar su estado. Mi preocupación aumentaba a cada segundo que pasaba... dejándo una clara evidencia de este hecho ante mi rostro sumamente angustiado - yo tambien cariño, pero papá ha vuelto para quedarse... te lo prometo. - corregí al instante - no... te lo juro.

Aguardaba alguna reacción por parte de Jake, el cual se encontraba detrás de mí... podía sentir sus ganas de saltar sobre mi y despedazarme, a la vez que su mente chillona y chulesca me recalcaba el haberlas abandonado. Él estaba tenso y no era el único, suponía que yo ahora debía parecerme a una estatua más que a otra cosa... pero un pensamiento en concreto hizo que me alarmase en ese mismo instante.

"Mira chupasangres, te lo diré desde ya. Pienso vivir siempre con ella y casarme si hace falta. Formaré la mejor familia y ni tu ni nadie se meterá en medio."

Sentí una punzada en mí, como una fuerte bofetada... eran celos. Aquellos celos incuestionables que sólo siente un padre al ver como su hija cae en las redes de aquel chico del cual te niegas rotundamente a que sostenga una relación. Y por si no fuese poco tener a Jacob imprimado en ella, lo que sentía Nessie por él era amor... y eso era lo que verdaderamente me desgarraba por dentro. Jacob se recostó al lado de Nessie, y me aparté porque muy a mi pesar, mi hija lo necesitaba a él también.

Estúpido Jacob... y esque tener aquella imagen de cachorro alegre y saltarín en mi cabeza era realmente incómodo, reprimí un gruñido que quedó en mi garganta, mientras lo taladraba con la mirada con... odio. Aquel que por naturaleza sentían nuestras razas, mutua aversión.

- No estés tan seguro... - me atreví a confrontar sus pensamientos con aparente tranquilidad.

En un rápido movimiento, fuí en busca de todo lo necesário para que a mi pequeña le bajase la fiebre. En apenas un par de segundos -incluso más rápido de lo habitual dada la situación- ya me encontraba de vuelta al salón. Me acerqué hasta donde estaban, con cautela y procurando mantener la compostura al estar al lado de Jacob. Coloqué cuidadosamente el paño de agua fría en la frente de Ness. A la vez que le ofrecía un vaso de agua con un medicamento eficaz que le haría bajar la fiebre. Desde que nació Nessie, procurábamos obtener todo lo necesario para que no le faltase de nada. Incluso el vano intento de que llegase a tener como preferencia la comida humana... - Es necesario amor, tómatelo...

por **Jacob W. Black** Mar Sep 08, 2009 3:17 pm

Estaba observando como el chupasangres mostraba su lado mas cálido; su lado de padre.
En un poco mas de un segundo él ya estaba aquí con una paño y un vaso que debía de ser una medicación. Le puso el paño en la frente y le acercó el vaso. Si Ness tenía fiebre sería mejor darle frío de otra manera...

Debíamos cooperar,una vez más, para obtener algo: curar a Ness.
-Chup...digo Edward, si tiene fiebre es mejor que le pongas la mano en la frente. Eso puede aliviarla más. Ella tendrá frío pero no podemos darle calor, así que yo...creo que sobro aquí. Puedo hacerle mal si sigo a su lado con la temperatura tan alta.-esto no quería hacerlo pero era conveniente para ella y debía sacrificarme para ello.-Llámame cuando necesites algo...ah! y dile una cosa: Que la quiero.
Ya sabía que decirle eso le iba a costar pero tenía que confiar en él, sería fiarse mucho pero creo que eso lo haría.
Fuí encaminandome hacia la puerta lentamente.

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