Corredores Del Castillo

habia estado dando una vuelta por la ciudad y llegue al castillo, me agradaba estar en mi hogar, entre a la biblioteca y pase la mirada por la fila de libros, elegi uno cuyo titulo llamo mi atencion y me acerque a una ventana enorme, alli me sente con la vista hacia afuera mirando el jardin, me puse comoda y coloque el libro sobre mis rodillas, comenze a leer, era una historias sobre una reina, inmediatamente me imagine a mi sentada en los tronos del castillo y con toda la guardia a mi servivio,sonrei, era un pensamiento muy agradable

Había regresado de una misión a las afueras de Volterra, pasaba por uno de los pasillos, cuando sentí el aroma de Jane cerca, me dirigí a donde me llevaba el aroma, y la encontré en la biblioteca, sentada al pie de una venta leyendo, me acerque ella con una sonrisa, - ¿Que haces, Querida hermana?- dije con un tono curioso aunque era evidente lo que hacia, sonrei ampliamente, tratando de verlo que leia.

estaba concentrada leyendo, hasta que escuche a mi hermano hablar, lo habia sentido venir pero no habia levantado la mirada -estoy leyendo- dije mientras levantaba el libro ya que el parecia sentir curiosidad. el libro se titulaba *the ice queen* tenia muchas cosas con las cuales yo me sentia identificada -como te fue en tu mision hermano mio?- pregunte mientras le hacia espacio para que se sentara a mi lado, cerre el libro por educacion y lo deje en mi regazo

Reí, y me senté a su lado, le sonreí para luego contestarle – Bien, tuve que matar algunos Neófitos,-dije tomando el libro que había dejado en su regazo,
- ¿que leías? – pregunte mientras buscaba el nombre del libro.

matar neofitos! cuanto lo envidiaba, aveces sentia que su vida era mas interezante y emocionante que la mia, ya que en ocasiones sentia que mi trabajo era muy sencillo,pero debia ser porque era efectiva, aunque el tambien lo era, cada uno a su manera. -espero que te hallas divertido- mire el libro que ahora estaba en sus manos -se llama the ice queen, es uno de mis favoritos- dije sonriendo, la verdad ese libro era como un diario en el que mostraba todos mis deseos ocultos

la verdad estaba de acuerdo con el, no era agradable que nos mandaran a distintas misiones, me sentia incompleta sin el a mi lado -la proxima iremos juntos- le asegure, y me encargaria de que fuera asi, convenciendo a mis señores de forma sutil. -puedes leerlo cuando quieras, no creo que tardes mucho- dije bromeando - a menos que te "duermas"- rei de nuevo y me recoste en su hombro, me gustaba tenerlo a mi lado, era una de las pocas personas que me importaban y no imaginaba mi vida sin el

el jugaba con mi cabello y no me incomodaba, rei de lado -creo que en menos de una hora ya lo habrias terminado- luego lentamente levante mi rostro y lo mire, la verdad si queria hacer algo divertido, nunca me canzaba de pasra tiempo con mi hermano ni de torturar humanos -la verdad no se me ocurre nada interezante, pero acepto cualquier sugerencia tuya- dije tomando su mano, esperando que se le ocurriera algo ya que hoy no tenia muy buenas ideas

Había pasado todo el día en mi habitación, deseaba ir de caza, pero no estaba mi querido acompañante Alec, el había estado en una misión la matanza no era divertida sin él, cuando sentí su inconfundible aroma me dí cuenta que estaba en la biblioteca con su hermana, caminé a paso humano por los pasillos del castillo, me detube en la puerta y la abrí sin hacer ruido alguno.
Escuché parte de su conversación y sin que me preguntaran opiné.

- Podríamos ir de caza ¿Les parece?- Mi voz sonó serena, calmada incluso despreocupada. Me mantenía con los brazos cruzados, con mi capa puesta preparada para salir.
- Me alegra verte denuevo Alec.- Luego saludé a Alec con una sonrisa.

Gusto, cuando le contestaría, note la presencia de Marie en la biblioteca,
le sonreí ampliamente, al escuchar su opinión,ella conocía mis gustos como yo los de ella,
- Igual a mi, Marie - le dijemientras me levantaba de ahí.

- Buena idea, Jane, ¿ te parece sivamos?- me voltee para verla, animado,
con aquella sonrisa impaciente y divertida, amaba ir de caza y mas con mis dos personas favoritas.

Dudé en abrazarlo o no, pero finalmente me decidí, lo conocía desde practicamente toda su existencia, él me conocía aunque al principio nuestra amistad no fue de las mejores, pero ahora que conocía todo nuestro parecido éramos inseparables amigos.
- Te extrañé mucho Alec.- Le susurré al abrazarlo con una sonrisa divertida.- ¿Crees que tu hermanita se atreva a romper las reglas?- Reí encojiéndome de hombros y mirándola de reojo, realmente no la observaba cazando ciudadanos de Volterra. Tomé la mano de Alec, como si odiara tener que perderlo nuevamente.

- Sabes que odio que te lleves toda la diversión.- bromié como una niña pequeña, entrelasando mi mano con la suya.

Simplemente lo besé, sin importarme si Jane estaba o no presente, lo había extrañado tanto que sin dudarlo ni un segundo. Noté como nuestros labios se juntaban en un pequeño beso, ambos sabíamos que quizás mi comportamiento no era el correcto pero nos daba igual.

- Esto fue divertido.- Reí mientras mis ojos miraban los suyos.-¿O quieres comprovarlo?- Lo tenté sonriéndole complicemente

justo cuando estaba dispuesta a divertirme con mi hermano llego marie, no la conocia mucho ni eramos muy cercanas, dijo que si me atrevia a romper las reglas -romper las reglas? yo soy quien hago las reglas- dije sonriendo mientras me ponia de pie, mire como se abrazaban -no sabia que se llevaban tan bien- le dije a mi hermano, la verdad no me gustaba mucho la actitud que estaba tomando esa niña, no me gustaba sentir que mi hermano queria a otra chica, en ese momento se besaron frente a mi, sin importarles mi presencia -arriba hay habitaciones para eso- bufe molesta y muy incomoda, nunca habia creido que tendria que presenciar eso

Estaba caminando por el castillo, buscando a mi pequeña hermanam que por los últimos días ya no era tan pequeña, la encontre junto a una chica y el chico que debia ser algo de ella, por la forma en que entrelazaban sus manos.

-¿Qué tal Marie?

Dije con una sonrisa.

Reí ante el comentario de Jane. - Para la próxima lo tendré presente Jane.- le guiñé un ojo divertida a ambos me acerqué a Alec y susurré en su oido.- Debo reconocer que tu hermana da buenas ideas.- Reí como una pequeña niña ante aquel comentario.

- ¡Camille!.- Exclamé al verla, no solté las manos de Alec, me gustó saber que mi hermana estaba "viva"- bien, gracias y tu qué tal?- le pregunté sonriente y divertida mientras reía en mi fuero interno

Le sonreí a mi hermana y luego miré a los presentes.

-Yo muy bien, y lo siento soy una descortés, soy Camille, un gusto.

Dije haciendo una leve reverencia y luego le guiñe el ojo a mi hermana, me ponía feliz que ella estubiese bien.

-Y diganme, ¿Qué tanto murmuraban?

Mire a Jane, y sonreí inocente - es una forma de cariño de “amigos”, ¿no, es así Marie? – la mire de
reojo aun con aquella, reí ante su cometario, me solté de Marie, y me acerque a Jane, la tome de los hombros por la espalda,
- ¿Estas molesta? - le pregunte con un tono preocupado, le guiñe el ojo a Marie, reí y me dirigí a Jane,
- Hermana tengo que hablar contigo, pero creo que será en otro momento- le susurre al oído, con voz tentadora para que no se negara.

Mientras miraba que alguien entraba, sonreí, - El gusto es mió, Camilla, yo soy Alec – dije aun atrás de Jane.

la verdad me sentia muy incomoda y el comentario de marie me parecia totalmente fuera de lugar "yo siempre tenia buenas ideas" pero no de ese tipo, la verdad esos actos me parecian un poco repulsivos. en ese momento llego otra chica, y nos saludom, cada ves habian mas miembros en la guardia que yo no conocia -mucho gusto camille, soy Jane- dije en tono cortes, luego me gire hacia donde estaba mi hermano -tienes razon, tenemos que hablar luego- dije mientras me queitaba sus manos de mis hombros, en ese momento no podia verlo como antes., todo habia cambiado muy rapido

Me agunté la sensación de risa que me iba a dar en aquel momento, fingí una tos mientras reía en silencio, finalmente no aguante más y sólo sonreí, después de eso me acerqué a Alec dando pequeños saltitos, lo tomé del brazo y lo llevé unos paso lejos de los presentes.

- ¿Te parece no ir de caza y quedarnos en mi habitación como en los "viejos tiempos"?- Mi voz era apenas audible para él, a los ojos de los presentes sólo se podía ver el movimiento de mis labios. Reí Alec sabía a lo que me refería, cuantas veces nos habíamos escapado hacia ella sin que nadie supiera, cuantas veces sólo las paderes habían sido nuestras cómplices.

- Además no me divertí en tu ausencia.- dije en un tono audible esta vez, lo miré de forma cómplice.- Digo, ir de caza no es lo mismo, me sentía sola.- Reí ante mis palabras.

Reí ante los comentarios de Marie, jamás había cambiado y no lo haría ahora. Miré a Jane y a Alec y hice una leve reverencia con mi cabeza. Luego posé mi mirada en Marie nuevamente.

-Marie, luego también debemos hablar, como hermanas, no te criticaré nada, ¿Vale?

Le dije con una sonrisa de complicidad, mi hermana me tendría que explicar porque sus acciones, aunque ya lo sospechaba...

Me reprimí una risa, note que Jane si estaba molesta así que hablaría con ella, pero primero tendría que disculparme con Marie – Eso no estaría mal- susurre de tal forma que solo ella me escuchara, solté una leve risita, y sonreí con malicia.

- lose, tampoco yo me divierto si no me acompañas- le dije, mirado a Jane- Marie te parece si nos vemos en un rato para ir a cazar, tengo que hablar con Jane, y tu deberías hacer lo mismo con tu hermana- dije tomándola del mentón.

-no te preocupes, la verdad no me molesta- dije sinceramente, la verdad habia permanecido en silencio pensando en que no tenia porque molestarme que esa chiquilla gustara de mi hermano, lo unico que me deberia importar era que el fuera feliz, asi eso significara que pasara menos tiempo a mi lado y que le tomara cariño a otra persona, no me gustaba la idea de compartirlo pero lo que si era cierto es que las dos no lo veiamos de la misma forma ni sentiamos lo mismo hacia el, yo no podia verlo como algo mas que mi hermanos y al parecer ella si, asi que no me quedaba de otra que aguantarme las escenitas-